A todos nos llaman constantemente de compañías de teléfono, eléctricas, gas, etc., prácticamente a toda hora e incluso recibiendo varias llamadas de la misma teleoperadora en un mismo día. Pues esto a Vodafone con D. Miguel Angel, se le acabó.

Un juzgado de Zaragoza el pasado mes de Febrero ha dictado sentencia condenando a Vodafone al pago a un usuario con 6.000 euros por los daños y perjuicios ocasionados. La juez considera que la actividad comercial de la compañía era ciertamente calificable como AVASALLADORA Y ACOSADORA vulnerando el derecho a la intimidad del afectado. Es un ataque y una ofensa a la intimidad, tranquilidad y descanso por esta persona esta actividad tanto por su horario laboral, como a los problemas de salud derivados de la falta del necesario y preciso descanso.

El usuario trabaja en un supermercado y se levanta a las 5.00 de la mañana llegando a su casa a la 13.00 del mediodía, lo que le obliga a acostarse antes incluso que comer. Durante este rato del descanso eran constantes las llamadas, por la línea de móvil y también por la de fijo. El afectado sufre cefalea diagnosticada, y que las llamadas le despertasen le provocaba un dolor de cabeza bestial.

Ante tal hostigamiento, el afectado hizo todo lo posible para pararlo, envío un formulario con sus datos a la compañía solicitando la cesación de las llamadas, se puso en contacto con la asociación Autocontrol, supervisora de asuntos publicitarios. Esta última hizo de mediadora y consiguió que Vodafone cesara en las llamadas, sin embargo, a los dos ó tres días volvieron.

Ante el empeoramiento de su salud y viendo que todos sus esfuerzos para erradicar este acoso, decidió denunciar ante el Juzgado. Recabó todos los informes médicos, emails con la compañía, grabación de llamadas, y finalmente fue reconocida la vulneración de sus derechos fundamentales por tal teleoperadora, derecho a la intimidad personal, tranquilidad y descanso.

Es sin duda una sentencia pionera que podrá abrir paso a posibles reclamaciones por tales conductas y prácticas comerciales.