En el contexto de la protección de los derechos laborales, una Sentencia del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Cantabria, establece un precedente significativo para los trabajadores contratados en prácticas. Este fallo reafirma el derecho de estos trabajadores a recibir, como mínimo, el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) de manera mensual, independientemente de las prácticas de regularización salarial anual que algunas empresas puedan llevar a cabo.
Contexto y Fundamentos del Caso
El caso surgió a raíz de una demanda interpuesta un sindicato contra la empresa, en la que se alegaba que la empresa no pagaba mensualmente a los trabajadores en prácticas el SMI, establecido en 950 euros mensuales para los años 2020 y 2021. Aunque la empresa solía regularizar los salarios anualmente para alcanzar el SMI en cómputo anual, en ocasiones el pago mensual no llegaba a los 950 euros.
El TSJ de Cantabria determinó que esta práctica no es válida y que los trabajadores deben recibir el SMI mensual completo, asegurando así una remuneración equitativa y suficiente que les proporcione un nivel de vida decoroso, tal como se establece en la normativa vigente y en consonancia con el artículo 35 de la Constitución Española.
Aspectos Clave de la Sentencia
- Pago Mensual del SMI: La sentencia subraya que el SMI debe ser percibido mensualmente. El Real Decreto 231/2020 fija el SMI en 950 euros mensuales, y esta cantidad debe ser abonada cada mes sin esperar a una regularización anual.
- Derecho Constitucional y Normas Internacionales: El TSJ se basó en el artículo 35 de la Constitución Española, que garantiza una remuneración suficiente para los trabajadores y sus familias, y en las normas internacionales que reconocen el derecho a un salario suficiente, como la Carta Social Europea y la Carta Comunitaria de los Derechos Sociales Fundamentales.
- Compensación y Absorción: Aunque la compensación y absorción de salarios puede aplicarse, esta regla no puede ser utilizada para justificar pagos mensuales por debajo del SMI. La empresa puede ajustar los salarios anuales, pero debe garantizar que cada mes los trabajadores reciban al menos el SMI.
Implicaciones para las Empresas
Las empresas deben revisar y ajustar sus políticas salariales para asegurarse de que todos los trabajadores en prácticas reciban el SMI mensual. Esto no solo cumple con la legislación laboral y protege a los trabajadores, sino que también evita posibles conflictos legales y sanciones.
Conclusión
La Sentencia del TSJ de Cantabria establece claramente que los trabajadores en prácticas tienen derecho a percibir el SMI mensual sin esperar ajustes anuales.
